SERVIDORES

Porque incluso el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir...

Marcos 10:45

¡Saludos, futuros servidores de nuestra querida Iglesia! Como Pastor, es un honor y un placer recibirles en este nuevo camino de servicio. Cada uno de ustedes tiene un don de parte de Dios que está listo para ser usado en la expansión del Reino. Al aceptar este llamado, han mostrado la disposición de su corazón para servir a Dios y a su pueblo. Recordemos siempre que nuestra labor no es en vano, cada pequeño acto de servicio tiene un impacto significativo en la vida de las personas que nos rodean.

En nuestra Iglesia, valoramos enormemente la excelencia. No se trata de ser perfectos, sino de dar lo mejor de nosotros mismos en todo lo que hacemos. En cada área de servicio, trabajamos juntos para glorificar a Dios a través de nuestro trabajo. Tenemos la oportunidad de mostrar el amor de Cristo a través de nuestras acciones y palabras. Trabajemos juntos, con amor y dedicación, sabiendo que a través de nuestro servicio, estamos reflejando el corazón de Jesús.

Espero con entusiasmo ver cómo Dios les utilizará en nuestra Iglesia. Que esta sea una experiencia de crecimiento espiritual y personal para cada uno de ustedes. ¡Dios bendiga su servicio!

Sirve en nuestra Iglesia

"Utiliza tus dones únicos para ayudar a construir el Reino."

"¡Hola valiosos servidores! Están contribuyendo a construir el Reino de Dios con su servicio apasionado. Cada gesto, palabra y momento de dedicación suma en esta misión trascendental. Su trabajo es más que valioso y apreciado. Recuerden, estamos sirviendo a Dios, no a las personas. Sigamos adelante, juntos, haciendo de cada servicio una ofrenda de amor al Señor. Sus dones y habilidades son únicos, y son la pieza clave que necesitamos para completar nuestro maravilloso equipo. ¡Gracias por ser una bendición para todos nosotros!"